Didier Hernán Gil
| Santa Marta, Colombia para DIAaDIA
Colombia hace honor a su lema: "El riesgo es que te quieras quedar". En el vecino país suramericano, no sólo el clima y la calidez humana enamoran al visitante. También los grandes y pequeños hoteles son su marca de presentación.
Uno de ellos es el Hotel Irotama, donde estuvo DIAaDIA. Con más de 45 años de tradición, este hotel se ha convertido en el lugar preferido para disfrutar realmente de vacaciones y descanso en medio de la naturaleza y la tranquilidad. ¿Por qué razón? Bueno, le pongo de ejemplo los siguientes detalles: durante su visita usted tiene a su favor un kilómetro de playa, bosques, lagos y jardines; dos modernos edificios tipo apartahotel (Irotama del Sol e Irotama XXI). Todo lo anterior conforma el más propicio ambiente donde el calor humano, las sonrisas y la cordialidad son la esencia y la filosofía de servicio.
Irotama es un resort muy especial, diferente, amable y exclusivo. En este sitio hay diez bares y restaurantes, cada uno con distintas especialidades, razón por la que satisfacen los más exigentes paladares: comida de mar, parrilladas, platos típicos regionales, pastas y pizzas; especialidades de la culinaria criolla e internacional hacen parte de la riqueza de los menús Irotama.
Bien sea para inolvidables vacaciones o importantes jornadas de trabajo, Irotama ofrece, además, un moderno centro de eventos y convenciones con auditorio para 600 personas, cuenta con todas las facilidades que aseguran la comodidad de sus huéspedes como una agencia de viajes afiliadas a boutiques, servicios de transportes, planta desalinizadora, plantas de tratamiento de aguas y planta propia de autogeneración eléctrica.
Seguramente, con su visita podrá comprobar que Irotama es una institución visionaria y, para ellos, abrieron paso a la naturaleza, por ende, se desecaron pantanos, se canalizaron las aguas y se habilitaron terrenos que se consideraban perdidos. En esos árboles, que entonces eran plántulas, habitan varias especies distintas de aves, iguanas, ardillas y, eventualmente, otras aves que van de paso.