Aunque ayer fue el último día de plazo para que todos los taxis se unificaran al color amarillo, la cantidad de vehículos que estaban en los talleres de chapistería en espera de ser pintados, era escasa.

En un recorrido realizado por DIAaDIA en Río Abajo y Parque Lefevre se observó que en algunos talleres había sólo un taxi, mientras que en otros ni siquiera se asomaban.

Sin embargo, la ausencia parecía justificada. William Sanjur, dueño del taller Kisyovis, en Río Abajo, aseveró que para la próxima semana tiene previsto pintar 12 taxis, porque muchos de sus clientes esperaron a "recoger todo el dinero posible hasta el 31 de diciembre", para luego hacer frente al gasto.

Eso también lo confirmó Ariel Gaona, un taxista que aún ayer, no tenía su vehículo en regla. Él pintará su auto en los próximos días, por lo que estará sin laborar una semana. Para sufragar sus gastos, maneja horas extras, aprovechando la bonanza de la época.

NO SOLO ES EL COLOR

Pese a que el cambio en los taxis también incluye instalar cintas reflectivas de cuadros blanco y negro, no todos los vehículos amarillos la tenían.

Mientras en la calle hay opiniones encontradas sobre la unificación del color de los taxis, la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT) reiteró que hoy desplegará un operativo en las vías para detectar a los vehículos que estén al margen de la ley, por lo que no permitirá que circulen.

CIFRAS

Las últimas estimaciones de la ATTT daban cuenta de que el 50% de los taxistas cumplieron pintando sus carros ayer.