
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Caminos de producción sufrieron daños.
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Caminos de producción sufrieron daños.
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Caminos de producción sufrieron daños.
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Caminos de producción sufrieron daños.
Agricultores no podían sacar los pocos productos que casecharon a causa de las crecidas de los ríos.
Caminos de producción sufrieron daños.
El 2011 se podría considerar como un año bastante complicado para el sector agropecuario panameño.
Las siembras y las cosechas se vieron afectadas por varias situaciones que les complicaron a los productores realizar la actividad a un 100%.
Malos caminos, destrozados aún más por las constantes lluvias, e inundaciones provocaron pérdidas en este sector.
Los productores de tierras altas y bajas en la provincia de Chiriquí reportaron pérdidas a consecuencia de la lluvia que azotó durante octubre, noviembre y diciembre, situación que también se reportó en las demás provincias productoras del país.
Solo en las comunidades productoras de Cerro Punta, Volcán y Las Nubes, en el distrito de Bugaba, se registraron pérdidas en la producción de cebolla, papa y hortalizas.
Para el presidente de los Asociación de Productores de Tierras Altas, Virgilio Saldaña, las pérdidas alcanzaron el 20% de la producción.
Otros que enfrentaron pérdidas por las lluvias y las plagas fueron los productores de guandú a consecuencia del hongo y la cochinilla que ha afectado unas 200 hectáreas valoradas en unos 300 mil dólares.
Los corregimientos donde se dieron estas afectaciones son Bocalatum y Meseta, en el distrito de Boquerón.
También los productores de arroz en el distrito de Alanje y David registraron la pérdida de 600 hectáreas de arroz, que fueron arrasadas por la crecida de afluentes.
A esto se suma el colapso de varios puentes que ocasionaron que muchos productores no pudieran sacar sus productos a los mercados de venta por varios días.
Por su parte, el entonces Ministerio de Desarrollo Agropecuario Emilio Keiswetter, nunca accedió a revelar las cifras oficiales sobre el monto económico de los productores relacionadas las pérdidas ocasionadas por las lluvias.