Esperan una solución. Jessica Pérez tiene 32 años de vivir en Las Uvas de San Carlos y es testigo del abandono en que se encuentra su comunidad.

Sabe que uno de los problemas es que las autoridades municipales no han resuelto el problema d el deterioro de la cancha de béisbol, lo que limita a la juventud de Las Uvas porque no tiene dónde jugar.

Sus dos hijos son testigo de esto, igual que el resto de los niños de la comunidad que no se animan a jugar porque el monte se los impide, aparte de que las mallas del cuadro están llenas de huecos y por allí se escapa la pelota y se pierde del otro lado del monte.

INTRANSITABLES

Pérez camina a diario hacia el cementerio municipal de San Carlos, que está cerca de su casa, a visitar a su hermano, quien falleció hace meses, pero cuando llueve ni siquiera puede acercarse al camposanto porque la carretera no la han terminado y se convierte en un lodazal.

"Nos dijeron que nos iban a arreglar la calle y tenemos años esperando que hagan algo", expresó la moradora.

Además de la calle, la Casa Comunal también es un problema, porque como no tiene luz, debido a que a los bombillos no les pasa la electricidad, los residentes no la pueden usar para fiestas de cumpleaños, bautizos y hasta actividades de la escuela.

Los moradores de San Carlos esperan que las autoridades empiecen a pedir votos para comprometerlos a reparar la calle, la Casa Comunal y el cuadro de béisbol. Aún tienen esperanza de que sus problemas sean resueltos.

OLVIDADOS

Jessica manifestó que la comunidad se siente menospreciada y que hay mucho desempleo.