Pinta de corazón. La capacidad de imaginación de la señora Yldaura Quintero de Díaz se ve plasmada en cada una de sus artesanías. La variedad de colores y la belleza de sus combinaciones transmiten armonía a cualquier observador.

Y es que, desde su humilde taller en la calle de El Níspero, en el alegre pueblo de La Arena de Chitré, provincia de Herrera, hace maravillas.

Desde que se entra a la casa, un festival de colores invaden las pupilas de todos. Jarrones, potes, adornos de todas las formas de animales y todos los tamaños son pintados por esta artesana, cuyo único trabajo ha sido este, de manera muy honrada.

SIGUIO ADELANTE

El solo llegar hasta sexto año del colegio no fue impedimento para que Yldaura aprendiera una labor que la ha ayudado a sobrevivir. Y es que, por tradición familiar, Yldaura aprendió la confección de potes y jarrones, los cuales hacía con sus manos, desde los siete años.

Poco a poco, fue ingresando más en el negocio hasta que encontró lo que más le gustaba, que fue la pintura, aunque, en ocasiones, también confecciona las artesanías.

En la misma calle donde vive Yldaura, se encuentran talleres de confección de jarrones y artesanías, por lo que ella los compra y los pinta para luego revenderlos.

De esta manera, Yldaura ha construido su casa, la cual ha convertido en un taller de pintura, en donde existen todas las clases de colores y muchas personas llegan hasta allí para comprarle.

TRABAJADORA

Al día, Yldaura pinta unas 25 piezas. Es toda un experta.