Decenas de familias enteras, residentes en La Unión y otros sectores del corregimiento de Canto del Llano en la ciudad de Santiago, no comieron el día de Año Nuevo, porque sus condiciones de pobreza no les permitieron poner algo a la mesa y compartir con sus familiares, vecinos o amigos.

Es así como una persona, que pidió la reserva de su nombre, se entera de esta cruda realidad y de inmediato pone en conocimiento del Programa de Ayuda Nacional (PAN) las precarias condiciones económicas en que viven estas personas.

A estas familias humildes, que no tuvieron un bocado en el nuevo año, se les llevó tres vehículos cargados de alimentos para repartirlos y de esa manera mitigar el hambre que muchos de ellos estaban pasando.

Cecilio De León, residente en La Unión de Santiago, dijo que, pese a que este lugar que está cerca de la capital veragüense, también está lleno de necesidades y gente muy humilde, por lo que las bolsas con alimentos entregadas les cayeron muy bien.

Fátima Agrazal, directora del Programa de Ayuda Nacional, destacó que las familias que recibieron las bolsas con comida son personas que realmente necesitan ayuda y que por años han sido olvidadas.

Los sectores que fueron beneficiados con la entrega de las bolsas de comida fueron: La Unión de Santiago, Ponuguita, San Martín de Porres y otras donde viven muchas personas en condiciones de pobreza.