
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Sus manos son rústicas, pero delicadas al labrar la madera.
Escoge la madera para hacer sus canaletes.
Escoge la materia prima para hacer sus canaletes.
Se entretiene haciendo lo que le gusta.
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Sus manos son rústicas, pero delicadas al labrar la madera.
Escoge la madera para hacer sus canaletes.
Escoge la materia prima para hacer sus canaletes.
Se entretiene haciendo lo que le gusta.
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Sus manos son rústicas, pero delicadas al labrar la madera.
Escoge la madera para hacer sus canaletes.
Escoge la materia prima para hacer sus canaletes.
Se entretiene haciendo lo que le gusta.
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Sus manos son rústicas, pero delicadas al labrar la madera.
Escoge la madera para hacer sus canaletes.
Escoge la materia prima para hacer sus canaletes.
Se entretiene haciendo lo que le gusta.
Uñapa tiene toda una vida haciendo canaletes. Foto: Carolina Sánchez
Sus manos son rústicas, pero delicadas al labrar la madera.
Escoge la madera para hacer sus canaletes.
Escoge la materia prima para hacer sus canaletes.
Se entretiene haciendo lo que le gusta.
Cuchillo en mano, sentado en el piso de su casa, en la comunidad de El Salto de Chucunaque, así lo encontramos.
Mientras labraba la madera, explicó que tarda tres días en hacer un canalete, pero antes debe internarse en la selva para buscar árboles de pino amarillo, pinoso y roble que son buenos para hacer el canalete. "Son tres horas en la montaña las que me toma buscar esos árboles", explicó.
Desde que Uñapa tenía 18 años aprendió este arte de su padre, sus tíos y primos. "Me ha tocado a mí enseñarles a mis hijos, pero ahora tres de ellos viven en Panamá", agregó.
Este darienita ya es todo un experto, pues para él labrar la madera es un oficio de todos los días, su destreza con el machete y sus movimientos para darle la forma al canalete son algo muy normal. Y es que Uñapa se moviliza por el río para hacer sus mandados y la pesca que es una de las actividades de esta comunidad.