
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Su hija la ayuda en el negocio.
Las personas disfrutan del río y de la buena comida.
La presentación de sus platos es muy importante.
Las carnes y pollos asados son muy buscados.
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Su hija la ayuda en el negocio.
Las personas disfrutan del río y de la buena comida.
La presentación de sus platos es muy importante.
Las carnes y pollos asados son muy buscados.
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Su hija la ayuda en el negocio.
Las personas disfrutan del río y de la buena comida.
La presentación de sus platos es muy importante.
Las carnes y pollos asados son muy buscados.
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Su hija la ayuda en el negocio.
Las personas disfrutan del río y de la buena comida.
La presentación de sus platos es muy importante.
Las carnes y pollos asados son muy buscados.
Es una mujer muy amable con sus clientes. Foto: HERMES GONZÁLEZ
Su hija la ayuda en el negocio.
Las personas disfrutan del río y de la buena comida.
La presentación de sus platos es muy importante.
Las carnes y pollos asados son muy buscados.
Esta fonda es manejada por cinco personas, todas integrantes de una misma familia.
Ángela López, junto a su hija y demás familiares llegan todos los días a las 9:00 de la mañana a iniciar la faena diaria de cocinar para todas aquellas personas que acudan al río.
Entre los platos más buscados están los patacones con puerco, yuca con pollo asado, langostino, entre otros.
Este negocio ya lleva 30 años en la familia y para la señora Ángela ya es una costumbre vender comida en ese lugar.
Todos los días no son iguales y ella sabe la cantidad de comida que prepara para cada día.
Su hija trabaja con ella, y según estas dos mujeres, lo que a las personas les gusta es el olor a leña que lleva cada una de las carnes.
Según esta familia, no hay nada imposible, todo, con esfuerzo y sacrificio, se puede conseguir.
Esta fonda fue presa de los dueños de lo ajeno hace algunos años, pero hoy en día han sabido salir adelante y darle al visitante lo mejor de sus comidas.
Para ella, luchar en familia es algo bueno, porque todos trabajan por un mismo fin y de manera mucho más organizada.