¡Que el verano no le agarre desprevenido! Muchas veces, cuando llega diciembre todo el mundo sólo piensa en Navidad y regalos, pero se olvidan que viene enero, y con él el verano. Pero si antes no tuvo tiempo de planificar su verano, aún le queda tiempo, y más si tiene hijos.
Asegúrese de buscar actividades recreativas, artísticas o deportivas. Trate de que su curso no sea rutinario en un aula de clases, tal y como se la pasó todo el año. Planifique un viaje cada fin de semana o cuando se pueda a la piscina, la playa o el río. Procure que en las actividades que realice, su hijo conozca caras nuevas.
|