Se robaron los cables. En la provincia de Colón, delincuentes cortaron los cables de fibra óptica de la empresa Cable & Wireless, lo que puso en peligro las llamadas internaciones a cinco países sudamericanos.
El corte se produjo en el puente de Quebrada Ancha, próximo a la comunidad de Nuevo San Juan.
Los dueños de lo ajeno confundieron los cables de fibra óptica con uno de cobre. Los cables son vendidos en casas revendedoras de metales a 30 centavos la libra, pese a que el precio en pie se cotiza en B.7.00. Mensualmente, 4 mil clientes en el país reciben interrupciones en sus servicios.
De acuerdo a la empresa, Colón volvió a convertirse en el lugar de mayor protagonismo de corte y robo de cables.
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