Arsenio Roca, de 76 años, fue ultimado a golpes en su residencia ubicada en Las Palmas de Gorgona en Chame. Quienes lo mataron no le robaron, pero huyeron en su auto que dejaron abandonado en el Rey de Vista Alegre, en Arraiján. El cuerpo de la víctima, se encontraba en el jardín, boca abajo y no se le encontraron lesiones por armas.
Por otro lado, Franklin Sandoya Montenegro, de 8 meses de nacido, falleció al ahorcarse con el hilo de una hamaca que estaba debajo del camarote donde dormía. Al parecer, el bebé dio vueltas en el lecho donde descansaba y al caer se enredó en el hilo de la hamaca.
|