Cuando no hay pasos elevados peatonales, los panameños amenazamos con cerrar las calles, con hacer mítines y cuanta protesta se nos ocurra. Pero lo cierto es que cuando construyen los pasos elevados, nadie los utiliza; o mejor dicho, muy pocos son los que los usan debidamente. Un caso típico es el de El Machetazo, en San Miguelito. Las autoridades han tenido que levantar una cerca para que los peatones no arriesguen sus vidas y usen el paso elevado, sin embargo, han llegado al extremo de saltarse la cerca, o cruzar debajo de ella, con tal de no usar el paso peatonal. Esto podría terminar cuando la Autoridad del Tránsito se ponga las pilas y comience a multar a los peatones, tal como hace con los conductores. Con esta acción bajarían las estadísticas de muerte por atropello y se utilizarían como debe ser, los pasos peatonales.