La proliferación de basureros improvisados es uno de los mayores problemas que confronta el distrito de La Chorrera, debido a que personas inescrupulosas arrojan los desperdicios por cualquier esquina, para evadir el pago de la recolección particular.

La administradora del Cementerio Municipal, Jennifer Estrada, indicó que está cansada de esta situación, porque aparte de la mala imagen que esto representa, también tienen que soportar los malos olores que emanan de los desechos.

Manifestó que lo peor de todo es que la basura está colocada cerca de un letrero que dice: "Prohibido botar basura, so pena de multa, La Alcaldía", que parece que nadie respeta, porque no se emiten las sanciones correspondientes.