Actos inmorales, riñas constantes y el consumo de licor por parte de menores de edad fueron razones suficientes para que el Municipio de Capira ordenara el cierre definitivo del Bar Discoteca Bohío Tropical, ubicado en el corregimiento de Lídice, solicitud formulada por la población.

A través de una nota dirigida al alcalde Iván Sauri y que lleva la firma de pobladores de Pueblo Nuevo y alrededores, éstos solicitaban "justicia", ante el excesivo ruido ocasionado por el citado local y que hacía "vibrar el techo y las paredes de las viviendas".

Dentro del local, constantemente se escenifican peleas, botellas que eran arrojadas hacia la calle, a lo que se suma la concurrencia de menores de edad.

A ello se une la forma indiscriminada como se efectúan disparos con arma de fuego.

El colmo, según los residentes de Lídice, es el abuso por parte de hombres y mujeres, quienes utilizan el patio vecino al Bar para realizar sus necesidades fisiológicas.