En días pasados, vi en un noticiero la imagen de un niño que estaba todo golpeado, debido a una paliza que le había propinado su padre.
No entiendo qué daño le puede hacer una criatura a un adulto para que sea golpeada de esa manera, no entiendo cómo puede haber personas así en este mundo.
Lo más triste del caso es que estos desalmados son "dizque" los más bravos, pero cuando le ponen un hombre de su tamaño, les aseguro que no harán nada.
Me parece indignante ver que en algunos casos, las madres (no he dicho que en este) permiten estos maltratos, pues su amor de madre queda en segundo plano al ir detrás del abusador que poco a poco acaba con la vida de la criatura que con tanto dolor trajo al mundo.
Son muchas las preguntas que me pasan por la mente, pero al final no obtengo respuestas; no concibo aceptar que el mundo sea así, prefiero pensar que lastimosamente existen personas que hacen del mundo lo que se les da la gana y andan por la vida humillando y atropellando a quien les plazca.
Hay varias frases que son emitidas por las personas al momento que escuchan noticias como esta: "hay que darle una paliza", o en el peor de los casos "hay que matarlo". Algunos son muy crueles, pero nada se compara con la acción cometida por el victimario.
No somos nadie para tomarnos la justicia por nuestras propias manos, pero ¿qué hacer cuando se ve a un infeliz de esta calaña golpear así a un niño o qué pasa cuando la madre se hace de la de la vista gorda? Bueno, aunque suene difícil, es cuestión de armarse de paciencia y tomar en cuenta que el problema no es nuestro, pero que a pesar de esto sí se puede hacer algo: ¡denunciar el caso!
El único consuelo es que el agresor y la alcahueta paguen con cárcel, pero esto no garantiza que haya un cambio, ¡qué triste!, ¿verdad?
Solo exhorto a las madres a que estén más pendientes de las personas con las cuales deciden formar su familia y con las cuales deciden dejar a sus niños.
Y a los que tengan la terrible experiencia de presenciar esto, por favor denúncienlo, pues al callar son igual de culpables que el maltratador.
