Destrozados. Ayer, la familia Cabrera Chamí realizó las honras fúnebres de Marta, quien fue asesinada de un tiro en la cabeza el pasado 5 de enero para robarle el BlackBerry.
Gilberta, madre de la víctima, no dejaba de llorar la pérdida de su hija. Terminada la ceremonia, la familia se trasladó al cementerio de Pueblo Nuevo.