Como es común durante el verano, la dieta suele cambiar. Debido a lo caluroso del tiempo, las personas suelen beber más líquidos que de costumbre; también el comer frutas se vuelve muy común a diferencia de otros meses. De igual forma, es importante la higiene de los alimentos que se consumen, ya que la limpieza debe ser más rigurosa, pues las altas temperaturas provocan ciertas reacciones que a veces no son tan beneficiosas para el cuerpo. Esa es razón suficiente para que las personas estén conscientes y mantengan una mejor higiene en los alimentos que comen.

Por eso es bueno que tenga en cuenta:

• La higiene: Si es posible, utilice clorox para matar cualquier parásito o microbios que puedan contener las frutas y hortalizas. Evite lo más que pueda consumir verduras crudas, y sin son frutas, lávelas antes de comerlas.

• Líquidos: Durante esta época seca es aconsejable beber más de 2 litros de líquidos al día, a comparación de otras veces que sólo son ocho vasos al día como máximo. Beber agua en abundancia o jugos y refrescos sin gas, es bueno para mantener óptimos niveles de hidratación. Los bebés necesitan un mayor consumo de líquidos que los adultos, así que tenga pendiente ofrecerle agua o jugos constantemente.

• Salmonella: Muchas de las infecciones en esta época del año, suelen estar originadas por la ingesta de alimentos crudos o poco cocinados, así que tome las consideraciones necesarias para evitar la salmonella. Por más que le guste un bistec en término medio, evite comerlo, pues puede lamentarlo. Puede usar el vinagre, que es excelente para combatir microorganismos patógenos en los alimentos.

• Conservas: Durante la época seca se utilizan con frecuencia los alimentos en conservas. Sin embargo, el grado de seguridad de estos productos depende del envase. Por eso, deseche las latas que estén abombadas, oxidadas o con abolladuras. Es necesario revisar la fecha de caducidad y no es aconsejable consumir su contenido cuando se tiene dudas al respecto.

• Legumbres: Los platos elaborados con legumbres no deben ser eliminados del menú veraniego. Las legumbres pueden ser ingeridas en una ensalada.

• Cenas ligeras: No es bueno iniciar las cenas con alimentos muy grasos para que la digestión sea más ligera. Antes de empezar el plato principal de la cena, un pequeño sorbete de limón ayudará a realizar la digestión posterior.