Como de costumbre, el nadador panameño César Barría se encontraba entrenando en la Piscina Eileen Coparropa, de Juan Díaz, para su próximo compromiso internacional.

Después de terminar su rutina, -cerca de las 6:00 p.m. del martes-, recibió la llamada de su madre, informándole que un terremoto de magnitud 7,3 en la escala de Richter había sacudido Haití donde se encontraba su progenitor laborando. El padre, del mismo nombre, trabaja para una empresa de la Zona Libre de Colón.

En ese momento, el tritón comenzó a preocuparse, pero no fue hasta las 8:00 p.m. del martes que pudo comunicarse con su papá, quien le informó que se encontraba en buen estado de salud.

César, al recibir esa noticia, sintió alivio al saber que su padre estaba vivo.

El señor Barría se encontraba en el Hotel Le Plaza, de la ciudad de Puerto Príncipe, junto a sus compañeros de trabajo los panameños Ricardo Cuello, Raúl Coronel, Argelis Silvera y otro de nombre Jair, cuando ocurrió el fuerte movimiento telúrico. Afortunadamente todos resultaron ilesos.

"Ellos estaban alojados en ese hotel cuando ocurrió el terremoto. Esta edificación antiguamente era un hotel de norteamericanos, por lo que contaba con todas las especificaciones contra movimientos telúricos", dijo César, siendo enfático en que otros edificios cercanos a este hotel sí colapsaron.

Además, sostuvo, que su papá le contó sobre el terror que se sintió en el país caribeño, y el caos que se desató en las calles de Haití, donde se podían ver a miles de personas corriendo ensangrentadas buscando a sus otros familiares.

"Varios edificios se derrumbaron por completo, entre ellos, un hospital y una escuela. Los muros de una cárcel de Puerto Príncipe también se desplomaron, lo que provocó la fuga masiva de presos, y además, en estos momentos hay vandalismo en esta isla caribeña". Eso fue lo que me comentó mi padre, quien afortunadamente se trasladó vía terrestre desde Haití hacia República Dominicana; sano y salvo.

REGRESO

Ayer en horas de la tarde, César Barría padre, junto a su compañeros, tenían previsto tomar un avión para retornar a Panamá.