Amparados por Dios
Elizabeth junto a sus hijas, recibieron la canasta de comida en un sencillo acto realizado en la garita de policía de la barriada. (FOTOS: Mirna Rogers / EPASA)

Rubén Polanco | DIAaDIA

"No me gané la lotería, sino el gordito con todos los acumulados". Así se expresó Elizabeth Torres, una mujer que perdió todo a causa de un fuego que dejó su casa hecha cenizas, en María Henríquez Rural, La Cabima, el 24 de diciembre pasado, cuando estaban en la iglesia esperando la Navidad.

Como lo prometido es deuda, ayer esta humilde mujer, madre y padre de cuatro niños, mostró su agradecimiento con la comunidad, luego de que el MIVI le llevara los bloques para construir su casa. En el transcurso de la semana, le enviarán los demás materiales.

Una comunidad unida

El Comité de Vecinos Vigilantes de la barriada Las Cumbres del Este, de María Henríquez, entregó una canasta más de comida y leche a Elizabeth, que no tiene empleo.

Además, le dieron al joven Alexander Morales un presente, por ser uno de los colaboradores dentro de la comunidad.

AGRADECIDA

Elizabeth agradeció a todos los que le apoyaron. La próxima semana se iniciará la construcción de su casa con la ayuda de los vecinos.

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