El mascota de la hueste santeña es más pequeña que un bate. Intrépido, alegre, amigable y soñador, así es Leonel Velásquez, un niño de 11 años con problemas de crecimiento físico, pero de gran estatura moral.

Leo es el recoge bate oficial de Los Santos y en cada partido se entrega para hacer su mejor trabajo.

"Me gusta, con eso ayudo al equipo", dijo mientras cumplía con sus funciones al final del partido.

Triste por la derrota, Leo recogía la indumentaria.

"Me gusta el béisbol, me gusta batear, no tengo implementos, por eso vengo, porque aquí hay muchos y puedo jugar", dijo.

Leo sueña con tener su propio bate y su propio guante.

"No tengo... me gustaría tener una manilla para jugar", sostuvo.

Actualmente, Leo es un buen estudiante de la Escuela Claudio Vásquez de Las Tablas.

"Le gusta ir a la escuela y nunca ha sentido temor a la vida", dijo la madre del recogedor de bates, Doña Justina. "Todos lo quieren y lo cuidan", agregó la señora, que sigue a cada momento los pasos de su hijo, cuando sale al terreno a hacer su trabajo.

"Él no le tiene miedo a la pelota... es muy valiente", añadió la madre.

Leo es la mascota más pequeña del mundo, inclusive más chico que el recoge bates personal del legendario George Herman "Babe" Ruth, a quien le decían, el "Bambino".

SU COMPINCHE

El mejor amigo de Leo en el equipo de Los Santos es el torpedero Virgilio Castillo.