GENTE COMO YO

El señor de los raspados


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La humildad es lo que más lo destaca.

Foto: HERMES GONZALEZ

  •  El señor de los raspados

    La humildad es lo que más lo destaca.

    Foto: HERMES GONZALEZ

  •  El señor de los raspados

    Los raspados son de múltiples sabores.

  •  El señor de los raspados

    Su clientela es variada.

  •  El señor de los raspados

    Su trabajo ha dado frutos.

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    La humildad es lo que más lo destaca.

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    Su clientela es variada.

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    Su trabajo ha dado frutos.

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    Su clientela es variada.

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    Su trabajo ha dado frutos.

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Redacci? - DIAaDIA

Sus rapados te refrescarán. Así es, Pacífico Aguilar es un humilde hombre quien desde hace un año se dedica a la venta del tradicional raspado, que es el deleite de grandes y chicos.

Se independizó

Los asiduos clientes de Pacífico desconocen la historia de grandeza que este ser humano posee. Es padre de tres hijos de 13, 10 y ocho años y por muchos años laboró en diversos restaurantes del país como cocinero, su amor por las artes culinarias es patente en cada uno de los platillos que hace; sin embargo, el deseo de superación y de buscar una mejor condición económica para ayudar a los suyos lo llevó a ahorrar lo suficiente para comprarse un carrito y caminar por las principales calles de la ciudad y vender raspado.

Cambio y consecuencias

Pacífico, de 41 años, dijo que el cambio no fue fácil, ya que el hecho de arrastrar el vehículo es tedioso de vez en cuando, y más en los días calurosos; sin embargo, le resulta más rentable que su trabajo anterior, además de que le permite socializar más con otras personas, en especial con extranjeros. Y es que su principal sitio de venta es el área del Mercado de Mariscos, un lugar muy visitado por personas de otros países que quedan fascinados con su atención y los raspados.

Rutina

Este hombre vive con sus hijos y esposa en La Chorrera, todos los días se despierta a las 6:00 a.m. para ir a la planta de hielo y buscar el trozo que le permitirá cumplir con su jornada, luego, a eso de las 10:00 a.m., comienza a vender. Finaliza su jornada en la tarde, la hora dependerá del movimiento del día.

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