En el juego entre Metro y Oeste hubo algunas escaramuzas entre los jugadores. (Foto: Josué Arosemena / EPASA)
Gustavo Aparicio
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Las amenazas y los actos de agresión entre peloteros que participan en el Campeonato Nacional de Béisbol Juvenil, sólo llevan a una conclusión: la violencia se ha apoderado de los jugadores y de los estadios.
A esa tesis llegó el técnico del equipo de Panamá Metro, Cristóbal Girón, quien vivió muy de cerca el encontronazo que tuvieron jugadores de su equipo con sus contendores de Panamá Oeste el domingo.
Para Girón, esa es la misma violencia que se vive en las calles del país, y que ya se ve reflejada en los fanáticos que acuden a los estadios y que es transmitida a los jugadores que están en el terreno.
De esta misma forma se expresó el director de Bocas del Toro, Julián Rivera, quien asegura estar molesto por la forma en que algunos fanáticos adultos empiezan a insultar y a decir obscenidades a los jugadores.
"Eso no es correcto, y mucho menos cuando se trata de jóvenes en formación. Los fanáticos deben comportarse mejor", acotó.
En tal sentido, Manuel Rodríguez, técnico de Herrera, sostuvo que todo es natural porque todos los equipos quieren clasificar.
No obstante, enfatizó que los fanáticos deben comportarse y la dirigencia debe considerar limitar la venta de bebidas alcohólicas en los estadios en lo que resta del torneo, para evitar confrontación.
¿CANTICOS?
Según Girón, la fanaticada ha copiado los "insultantes" cánticos del fútbol, distorsionando la fiesta del béisbol.