Pierden la calidad

Tenga cuidado. Quitar la sed y encontrar un refresco frío es lo ideal para todo aquel que va a un minisúper o abarrotería, pero cuando esto no sucede y los productos están más calientes que un té recién hecho, algo debe estar sucediendo.

Así lo confirma el señor Arturo Zamora, quien aseguró que desde hace tiempo cada vez que llega a una tienda en la mañana, los jugos y productos lácteos están sudados y al beber están calientes como si estuvieran fuera de la refrigeradora, al reclamar, le dicen que no se lo tome si no quiere, lo que sin duda le molesta.

Esto se debe a la nueva práctica que han desarrollado los comerciantes de apagar las neveras para ahorrar algo de energía durante la noche, cuando abren sus puertas las conectan nuevamente, pero esto podría atentar con la vida de las personas.

Algis Torres, director de la Regional de Salud de San Miguelito, Las Cumbres y Chilibre, dijo que esto es un mal de nunca acabar y que son muchos los dueños de locales a quienes han sorprendido en esto, además de que los productos pierden la cadena de frío y calidad, amenazan la salud de los panameños.

Causa de enfermedades

Algunas de las enfermedades que pueden producir el ingerir los alimentos cuando dejan perder su refrigeración es la diarrea, vómitos e intoxicaciones que de no ser atendidas a tiempo pueden llevar al afectado a una sala de hospitalización.

Y es que, los productos llegan frescos a la fecha de expiración si se mantienen dentro del frío, de no ser así, tienden a agriarse y producir bacterias, aseveró Torres.