Unas cinco organizaciones magisteriales de todo el país se reunieron en la ciudad de Santiago, provincia de Veraguas, con el fin de organizarse para una posible huelga nacional al inicio del próximo año escolar, en marzo del 2010. Estas medidas se sostienen, según los educadores, por las pretensiones de las actuales autoridades educativas en levantar falsas expectativas con la transformación curricular de la educación, el mal manejo en los procesos de nombramientos y las constantes amenazas de levantar procesos judiciales en contra de dirigentes magisteriales.