No saben cómo quedarán. Incertidumbre entre los trabajadores de la Caja de Seguro Social (CSS) y del Hospital Integrado San Miguel Arcángel ha dejado el anuncio de la implementación de un Sistema Único de Salud.

Despidos masivos y privatización de los servicios es lo que esperan ¿La razón? No saben cómo va a funcionar. Aunque ayer la Comisión de Garantes que trabaja en las reformas al sistema de salud se reunió con los directivos de la Caja de Seguro Social (CSS ), para explicar cómo funcionará, poco se sabe.

Los Garantes propusieron la creación de la Autoridad Nacional de Atención de Salud (ANAS) y, por ende, desaparecerá la figura de la Coordinadora Nacional de la Salud (CONSALUD), que rige el funcionamiento del Hospital Integrado San Miguel Arcángel.

Marta Martínez, presidenta del Patronato del HISMA, dijo que ven un futuro incierto: "Nadie sabe decirnos cómo vamos a seguir trabajando... Nada garantiza que en el sistema único de salud vamos a tener el mismo nivel de atención y calidad del servicio que estamos brindado", dijo Martínez.

Otro problema que se presenta es que tendrán que liquidar a los trabajadores. Hay unos 250 que se rigen por el Código de Trabajo y se preguntan si les quedarían debiendo a las empresas externalizadas y a los proveedores. Por su parte, Gabriel Pascual, coordinador de Asociación Nacional de Funcionarios de la Caja de Seguro Social (ANFACCS), dijo que se privatizarán servicios generales como mantenimiento, lavandería, almacén, farmacias, laboratorios, entre otros.

ACCIONES

La ANFACCS se pronunciará hoy en una conferencia de prensa, y el patronato del HISMA pedirá una cita con el ministro de Salud.