A pesar de que las autoridades determinaron que los autos para el transporte selectivo de pasajeros debía unificar su color para mejorar ciertos aspectos del servicio, los usuarios lamentan que el cambio fue precisamente en el color, pues las malas prácticas de muchos conductores no han cambiado.
Y es que el famoso "no voy" sigue siendo la nota característica con los ahora taxis amarillos, pues los conductores siguen escogiendo cuál es la ruta por la que prefieren ir.
La gente se pregunta ¿qué pasó con las supuestas sanciones que iban a poner a quienes se negaban a brindar el servicio a los pasajeros? Al parecer quedó archivado en un cajón de alguna oficina del Gobierno.