A pesar de que la vida es muy dura, no se cansa de luchar por llevar siempre el sustento a su hogar.

Este es el caso de la señora Yeny López, que actualmente tiene un puesto ambulante de frutas frente a Plaza Concordia, ubicado en la vía España .

Nos cuenta la señora López, que durante cuatros años trabajó en un almacén y a raíz de haber quedado desempleada decidió vender frutas.

La idea fue porque sus padres siempre se han dedicado a este negocio y fue así como empezó invirtiendo B/. 20.00 balboas para empezar y donde actualmente lleva 11 años vendiendo toda clase de frutas.

López, que actualmente vive en Curundú, se levanta todos los días a las tres de la madrugada para estar a las cinco de la mañana en el mercado y comprar las frutas que va a vender durante el día, empezando a vender desde las 6 de la mañana y cerrando a las 6 de la tarde.

López indicó que ella sola tiene que mantener a sus dos hijos, una hija de 9 años y un niño de dos años y que todos los días se los lleva para su trabajo porque el dinero no le alcanza para pagar y que se los cuiden.

"La vida es tan difícil que la ganancia que hago diariamente no me alcanza para sufragar los gastos, porque cada día aumenta la luz, la canasta básica, el pasaje y todo eso influye grandemente en la economía, que a veces no alcanza para comer", dijo.

Muy triste afirmó López, que está cansada de madrugar todos los días y que sus hijos están perdiendo parte de su infancia porque diariamente tiene que llevárselos para el trabajo y que debido a esto, ellos ya no juegan con otros niños de su edad. El mayor anhelo de López es llegar a conseguir un buen empleo, ganar un buen sueldo para poder mantener a sus hijos, para que ellos tengan una mejor calidad de vida y también poder sufragar todos los gastos de su hogar, porque la ganancia que recoge todos los días no le alcanza.

INCONFORMIDAD

Considera que cada día la vida se pone más dura, porque todo se encarece y el dinero no alcanza.