Tras la prueba de huellas dactilares se logró capturar a un "ladronzuelo" de joyas. Jonathan Luis Vega, de 19 años, residente en Santa Cruz de Curundú, se aprovechó de que una familia se fue de rumba el pasado 31 de diciembre del 2004, para introducirse en la residencia Nº 504 ubicada en el corregimiento de Ancón en calle Parita y llevarse todo lo que brillaba. Cuando la familia regresó a su hogar, se topó con que los amigos de lo ajeno se habían robado un dije de oro de 18K en forma de cruz, valorado en 2 mil balboas, una sortija de oro de 400 balboas, un juego de aretes y sortija de mil balboas, un collar de perlas de 300 balboas, aretes de oro blanco con perlas valoradas en 700 balboas, un arma calibre 38, dos cámaras digitales de más de mil balboas, un reproductor de DVD y un celular. Pero además, también Jonathan pretendía hacer tremenda fiesta, porque se llevó varios licores de la residencia.

EMPEñO

Las prendas fueron empeñadas en varios locales. Jonathan se rehusaba a devolver el resto.