El pívot chino Yao Ming reivindicó una jornada más su gran momento de forma al conseguir 30 puntos y 17 rebotes que ayudaron a los Rockets de Houston a ganar 96-89 a los SuperSonics de Seattle, que perdieron el undécimo partido consecutivo, la peor marca de su historia.
Junto a Ming, que jugó 39 minutos, el escolta Tracy McGray, en su segundo partido desde que volvió recuperado de la lesión de rodilla, aportó 17 tantos y cinco asistencias.