Un lanzamiento pegado que dio en el codo de Juan Vicente López, le quitó la oportunidad de lanzar un "juego perfecto", pero al final la magistral labor de Lenín Picota tuvo su premio: un juego sin hit ni carreras, mientras Chinandega tomaba la delantera 3-2 en la serie final al vencer ayer 4 a 0 al León.

Lenín Picota sigue demostrando que es uno de los mejores brazos que posee la Liga Profesional de Béisbol de Nicaragua y el béisbol panameño.

Picota, quien hasta el octavo episodio tenía juego perfecto, trabajó los nueve capítulos, ponchó a nueve y retiró a los primeros 23 bateadores en fila. El primero en llegarle a base fue Vicente López, quien fue golpeado.

Además del golpe, la única situación apretada que vivió Picota fue en el séptimo inning, cuando enfrentó a Eddy Talavera, a quien llevó al conteo máximo y lo que parecía una cuarta bola que le daría la base a Talavera, fue "cantada" como strike.

"Me siento sumamente emocionado. Nunca antes había tirado un juego de esta naturaleza y lo vine a hacer en Nicaragua en un momento especial de la liga. Me siento muy contento", destacó Picota en entrevista dada a la página web de la liga de Nicaragua.

"Lo más importante fue el control. Estaba poniendo la bola donde yo quería y la única vez que fallé fue para golpear a Juan Vicente", agregó.

Picota, con este logro, se une a un selecto grupo de lanzadores que ha logrado partidos sin imparables ni carreras.

Los otros dos serpentineros son: Antonio Chévez y Juan Oviedo.