El serbio Novak Djokovic, tercer jugador del mundo, venció al suizo Roger Federer, primer favorito y defensor del título, por 7-5, 6-3 y 7-6 (5) en dos horas y 28 minutos y alcanzó así la final del Abierto de Australia.
Federer no perdía en este torneo desde las semifinales de 2005, contra el ruso Marat Safin, y era la decimoquinta vez que se plantaba en esta ronda desde la del 2004 en Wimbledon.