La necropsia realizada a la joven universitaria Aira Guadalupe Guerra, asesinada en diciembre del año pasado, reveló que su cuerpo fue quemado con gasolina y que recibió un fuerte golpe en la cabeza, al encontrar fisuras en el cráneo, explicó la abogada querellante el caso, Gisela Vega.
Además, tenía heridas en el costado derecho que fueron provocadas presuntamente con un arma blanca y se hallaron rastros minúsculos en una de sus uñas que determinan que se trata de piel humana y del sexo masculino.
Por este homicidio, permanece detenido en la Cárcel Pública de David el entonces novio de Aira, Rolando Samudio.