Las décimas cantadas eran muy comunes en las islas canarias en España.
Odalis Orozco
| DIAaDIA
¿Cuánto sabes de los cantos de décimas panameñas? A quién no le gusta escuchar estos torrentes llenos de sentimientos y expresiones. Hay quienes se les ponen los pelos de punta al escuchar estos versos y controversias, que son parte de la identidad del panameño. Las décimas son todo un arte literario. Pero muchos de los cantores de décimas sienten que esto se está perdiendo o muchos jóvenes lo vulgarizan para ganar simpatizantes.
Para el trovador Miguel Rivera (El Águila de Azuero), con 33 años de trayectoria, se tiene que preservar este arte a través de una escuela de canto de décima, como se hace en Cuba. Enseñar realmente qué es la décima, sus versos y sus cantos y sus salomas.
HISTORIA
La décima como expresión poética musical es proveniente de los pueblos españoles, para manifestarse, celebrar y expresarse poéticamente, ya como acervo folclórico tradicional.
Estas expresiones poéticas musicales fueron traídas por los conquistadores españoles a los pueblos de América.
Cada pueblo de Latinoamérica tiene algunas diferencias al expresar su décima cantada.
Genéricamente, una décima en poesía es una estrofa constituida por 10 versos octosílabos. Vicente Espinel, de fines del siglo XVI, fue quien fijó la estructura de rimas de la décima, además de que sólo puede haber pausas después de los versos pares, particularmente después del cuarto. Durante los siglos XVII y XVIII la décima se usó con frecuencia para el epigrama y la glosa de otros poemas.
Miguel Rivera indicó que es favorable lo que actualmente se lleva a cabo en los medios de comunicación con programas en los que se incentiva a los cantores de décimas a participar. En especial el programa dirigido a los niños, pues se van sembrando nuevos talentos, pero recomendó que cuando se califica, se les debe decir cuáles son las fallas y cómo mejorarlas, pero siempre animándolos, porque el niño es más susceptible y al ser eliminado puede que abandone el arte porque no se siente capaz. Dijo que hay que reconocer el valor de los niños y adultos que participan de estos programas, porque improvisar décima para controversias no es fácil.