Buscan seguridad

Encerrados. Vivir en la tranquilidad de su hogar se ha vuelto una utopía para los panameños, ya que por la ola de violencia, muchos ciudadanos han optado por estar entre rejas, como si fueran presos.

Esto se viene dando en los últimos años, por lo que los talleres de herrería están haciendo "japay", debido a la gran demanda para la elaboración e instalación de verjas y puertas de hierro.

El señor Santiago Córdoba, residente en Villa Luchín de Tocumen, fue víctima de los ladrones hace un mes, esto lo llevó a cercar totalmente su propiedad con verjas de hierro, cuyo costo supera los mil dólares, pero Mariela Bonilla no se quedó atrás y para su seguridad pagó 399 dólares por las cámaras de vigilancia que colocó en su casa.

Según Rafael Niño, del taller de herrería Toñito, S.A., la gente, por seguridad, manda a confeccionar verjas y hasta cinco puertas a la vez. La confección de esto puede costar unos mil dólares y 300 dólares la instalación. Si se instalan y elaboran puertas para los garajes, una sola cuesta alrededor de 550 dólares.

DIAaDIA consultó al respecto a la psicóloga Tania Ramos, quien aseguró que las personas toman estas medidas porque al vivir en áreas rojas se trauman después de ver tantos peligros. Encerrarse tras los hierros los hace sentirse protegidos y más seguros, física y mentalmente. Eso, en el caso de los adultos. Los niños no tienen idea del peligro.