Siguen atemorizados. A cuatro días de la muerte de tres guerrilleros de las FARC a manos de unidades del Sistema Nacional de Fronteras (SENAFRONT), la situación en las comunidades de Alto Tuira, provincia de Darién, no ha cambiado mucho.

Los moradores aún siguen con el temor de una represalia por parte de las FARC, en venganza por sus guerrilleros caídos. Y es que, en medio de la incertidumbre, ayer recibieron bolsas de alimentos, a fin de paliar la escasez de comida que enfrentan desde que se dio el incidente en Balsal, donde murieron los tres miembros de las FARC de Colombia.

La movilización de helicópteros sobre Boca de Cupe, Balsal, Matugantí, Yape, Pinogana y otras áreas de Alto Tuira provocó temor y hasta rumores de otro enfrentamiento, pero se trataba de la distribución de las bolsas de alimento. Sin embargo, este medio conoció que ayer se dio un éxodo de indígenas de Balsal, Púcuru, Paya, Sobiaquirú y Matugantí hacia Boca de Cupe por temor.

Aún no se permite el paso de alimentos para abastecer las tiendas de esa zona.

En tanto, el ministro de la Presidencia Jimmy Papadimitriu confirmó que la seguridad en Darién se continúa reforzando. En medio de las declaraciones, realizadas en La Chorrera, reconoció que la designación de Giuseppe Bonissi como Procurador suplente a Ana Matilde Gómez, fue hecha por el presidente Ricardo Martinelli desde el extranjero.