Ahora que es verano muchos son los pequeños que juegan en las calles, lo que representa un peligro, ya sea con el tráfico o los tendidos eléctricos. Ver en los diferentes barrios niños volando cometas en la calle no es cosa rara. Según la ama de casa María Pineda, muchas veces no se le presta atención a este inofensivo juguete, por muchas razones las vuelan cerca de casa. Pero ojo, la situación va más allá de eso. A continuación algunos consejos para evitar cualquier percance.
Como medida de precaución, revise que la cometa no tenga nada de metal y que la cuerda no tenga alambres. Si la cometa se enreda en los cables eléctricos, no trate de zafarla; ordene a sus hijos que suelten el cordón y que dejen la cometa donde está. Enséñeles a sus hijos a no jugar encima o alrededor de los transformadores montados sobre bases; esos transformadores son pequeños gabinetes de metal, colocados sobre placas de cemento, que convierten el alto voltaje en bajo voltaje para el uso de residencias y establecimientos. Hágales saber a sus hijos, desde muy pequeños, que no deben acercarse a ningún cable que esté caído, ni tampoco a los objetos que estén en contacto con ellos, aunque piensen que no tiene corriente, ni tampoco a un poste partido y del cual sobresalgan los cables interiores. Enséñeles cómo los árboles, sobre todo los húmedos, pueden ser conductores de electricidad. Si a sus hijos le gusta volar cometa llévelos a un campo de fútbol o a una playa.
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