Rodolfo, su niño, la ayuda en su puesto. (Foto: NAYELI WILLIAMS / EPASA)
Nayeli Williams
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Batidos a la orden del día. En una acalorada mañana, Elisa Campos, una joven de 29 años, se encontraba picando las frutas para preparar las ensaladas que tanto le gustan a sus clientes. Ella es una mujer que labora desde hace dos años en su puesto de venta de frutas, verduras, ensaladas y batidos naturales, el cual está ubicado en Calle 6 Parque Lefevre.
Se pudo observar que a la hora de pedirle un batido había que formar fila, porque sus clientes estaban pendientes de que les preparara un batido a su gusto.
En ese local lo que más se vende son sus batidos de frutas, que a criterio de los clientes son muy sabrosos y hasta su precio es atractivo, ya que son módicos.
DE MENOS A MAS
Antes de tener su local, esta incansable mujer trabajaba como ayudante en un kiosco de venta de verduras, pero la necesidad de independizarse la llevaron a ahorrar lo suficiente para tener su establecimiento de venta de batidos el que se llama: "El kiosco de Rodolfo".
DIAaDIA conoció que este nombre fue colocado en honor a su hijo de siete años, quien asegura que es el motor que le da fuerzas para seguir trabajando, pues a pesar de todo reconoce que ese trabajo no es fácil y que requiere de mucho sacrificios.
Esta joven se levanta todos los días a las 5:00 a.m. para cortar las frutas y verduras que venderá en el día, luego a las 7:30 se dispone a vender para luego terminar su dura jornada a eso de las 5:30 p.m.
CUIDA A SUS CLIENTES
Además de velar por su salud y la de su hijo, esta mujer protege a sus clientes, pues asegura que con una buena alimentación basada en la frutas y vegetales se previene enfermedades, por eso ella se dedica de lleno a la venta de este tipo de productos que benefician a sus clientes que se sienten agradecidos por los cuidados que reciben.
DESEO
Elisa sueña con tener un establecimiento más grande, en el que sus clientes se sientan cómodos.