¡Triste, pero cierto! El músico cubano Pedro Knight, viudo de la legendaria Celia Cruz, de quien fue inseparable durante cuatro décadas, falleció ayer en Los Ángeles a los 85 años de edad, en medio del escándalo por demandas sobre la herencia de su esposa. ¡Qué horror!
Increíble, la televisora hispana Univisión precisó que el músico, a quien Celia bautizó cariñosamente como "mi cabecita de algodón", murió en la madrugada en un hospital de la ciudad californiana, luego de que su salud se deteriorara en los últimos días.
HISTORIA PARA RECORDAR
Nacido el 30 de septiembre de 1921, Pedro Knight Caraballo era uno de los trompetistas de la Sonora Matancera, cuando Celia Cruz fue contratada como cantante de la agrupación caribeña.
Knight -quien tenía varios hijos de una relación previa-y Cruz se casaron en 1962 y, desde entonces, el músico se dedicó a impulsar y apoyar la carrera de su esposa.
El matrimonio estuvo unido durante 41 años, hasta la muerte de la estrella cubana, ocurrida en su departamento de Nueva Jersey el 16 de julio de 2003, debido al cáncer.
LE FALTABA SU AZUCAR
Desde el fallecimiento de Celia, se agravaron las dolencias de Knight, quien padecía diabetes y baja presión, y en varias ocasiones fue hospitalizado, entre otras razones, por síntomas de embolia y derrame cerebral.
Los últimos dos años, el músico vivió con la familia de Luis Falcón, ahijado y uno de los albaceas del legado de Cruz.
Knight fue demandado por su hija Ernestina y por una hermana de Celia Cruz, en relación con la herencia de la cantante cubana, intérprete de los hits "Yerberito moderno" y "La negra tiene tumba’o". Esa fue una de las grandes razones de su empeoramiento.
La cadena Univisión informó que en los últimos días, el músico ya no hablaba y era alimentado a través de una sonda, además de que el habla le fue afectada por una trombosis que sufrió en su cumpleaños # 84.
VOLVERA CON CELIA
Ernestina Knight, hija del artista, dijo que en los próximos días el cuerpo de don Pedro será trasladado a Nueva York, para ser sepultado en la cripta donde volverá a acompañar a su querida Celia. ¡Que Dios los tenga en la gloria!
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