“Para ser un gran campeón, tienes que creer que eres el mejor, si no lo eres, haz como si lo fueras”, dijo hace algún tiempo Muhammad Ali, la figura más grande del boxeo mundial.
Precisamente estas sabias palabras son las que pone en práctica en estos momentos el joven boxeador panameño Luis “Pan Blanco” Ríos.
Hoy, las ganas que tiene Ríos en superarse van más allá de aumentar el número de victorias en su hoja de trabajo. Su sed de gloria lo llevan a mentalizarse de que él será quien le regale a Panamá el trigésimo campeón mundial de boxeo que tanto ha anhelado.
Con un palmarés de 18-1-1-13 KO, la oportunidad de oro le llegó a Ríos, el retador número uno a la corona minimosca (108 libras) de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), situación que no desaprovechará, pues el ganar la corona mundial, en poder del filipino John Riel Casimero (17-2-0-10 KO), cambiaría muchas cosas en su vida.
“Pan Blanco”, quien se dedica solamente al boxeo, ha manifestado que tiene todos sus pensamientos puestos en la diadema de las 108 libras de la FIB. Y la suma de esos pensamientos tendrán su resultado el próximo 16 de marzo en el Megapolis Convention Center, en Panamá, cuando intercambie metralla contra Casimero.
Película de terror
Antes de “Pan Blanco”, once boxeadores panameños han fallado en el intento de convertirse en el trigésimo campeón mundial. Entre ellos están William “La Esperanza Blanca” González, Walter “El Ratón de Oro” Tello, Whyber “Showtime” García, Irving “El Relámpago” Berry, Ameth “Cloroformo” Díaz, Roinet “Mus” Caballero, Alberto “Metralleta” Mosquera, Edwin “La Pantera” Díaz, Ricardo “El Matemático” Núñez, José “El Indio” Miranda y Dirceu “El Explosivo” Cabarca.