Al menos 39 familias en el sector de Cerro Punta están en peligro, porque el caudal del río Chiriquí Viejo sigue aumentando, pero los dueños de las propiedades en riesgo se niegan a desalojarlas.

El desbordamiento se dio en las comunidades de Bambito y Entre Ríos, y ayer en la tarde, el río Caldera comenzó a derrumbar el relleno de la canalización que hizo el Ministerio de Obras Públicas. Además, en Las Cumbres, corregimiento de Cerro Punta, hubo un desprendimiento de techo.

Mientras una fuerte brisa azota el sector de Tierras Altas, exactamente en Boquete, el mal tiempo se mantiene en las provincias de Bocas del Toro, Veraguas y Colón.

En tanto, 15 vehículos quedaron atrapados (no pueden cruzar ni retomar) por dos deslizamientos. Uno fue sobre el kilometro 66.

De acuerdo al SINAPROC, su personal, junto al MOP, realizan evaluaciones y evacuaciones preventivas en el kilómetro 68, porque la corriente de la quebrada Willy Masu está socavando la vía.

El frente frío también dejó consecuencias en el sector de San Lorenzo, cuando el río Fonseca atrapó a 15 personas que utilizan una isleta para trasladarse hasta sus residencias.

Bocas del Toro quedó incomunicada desde las 11:00 a.m. de ayer, cuando comenzaron a registrarse los primeros derrumbes.

PREOCUPADOS

David Samudio, miembro de la Asociación para el Desarrollo Integral de Panamá, explicó que Tierras Altas están viviendo nuevamente la amarga experiencia de hace dos meses.

ALERTA

SINAPROC declaró la alerta verde para Chiriquí y sugiere bajar la palanca del panel eléctrico y dirijirse a lugares más altos.