Se cree una chiquilla

Imagínense, que la actriz asistió junto a su hija al cumpleaños del novio de Cyrus e incluso se comenta que intentó ligar con Zac Efron en otro evento. ¡Madre Santa!

Recuerden que el punto final de su relación con Kutcher ha destapado el verdadero estado de Moore. No solo sus problemas con el alcohol y las drogas, sino que además Demi está cegada con seguir luciendo joven y atractiva.

Por eso, la actriz, que no asume los años que va cumpliendo, asistió a la fiesta del novio de Miley Cyrus, Liam Hemsworth, en un pub de Los Ángeles, junto a su hija Rummer Willis, de 20 años.

Rodeada de jóvenes que no superaban el cuarto de siglo, Demi pasó la noche "bebiendo Red Bull en la zopa VIP". ¡Qué bárbara!