Una niña de ocho años sufre golpes, tras ser atropellada. La pequeña Maylín Pinto se disponía a cruzar la calle junto a su madre Maritza Díaz y otros primos cuando un vehículo, conducido por Eduardo Enrique De Sousa Cuevas, la atropelló. La pequeña quedó tendida en la calle, sangrando por la nariz. Es entonces cuando Dalia Pinto, tía de la niña, la cargó para quitarla del centro de la calle y la colocó en la orilla. Maylín le respondió: "Tía". Ella solo le dijo: "Quédate quieta".

Este accidente ocurrió ayer a la 1:00 p.m. en Villa Cárdenas, en la vía que conduce a Chivo Chivo.

El conductor, luego de que atropellara a la niña, avanzó y fue cuando los moradores molestos por la situación agarraron piedras y se las lanzaron. Los vidrios del vehículo, que era del Estado, quedaron destruidos y las personas obligaron a que De Sousa Cuevas trasladar a la niña al hospital. Él negó en todo momento que hubiera querido escapar de la situación.

Minutos después la tía de la menor hizo un simulacro de cómo había ocurrido el hecho. En su suéter había gotas de sangre, pues cargó a su sobrina para ponerla en la orilla de la calle. Expresó que estaba molesta, porque a cada momento les han notificado a las autoridades locales que necesitan que instalen policías muertos para que de esa forma los conductores se vean obligados a disminuir la velocidad.

Lo más sorprendente es que a diez metros de donde ocurrió el incidente la comunidad había improvisado un policía muerto, que estaba construido de tierra, para que los carros no transiten a velocidad.

La comunidad dijo que siempre son los perros los que mueren atropellados por los carros que pasan a velocidad.

CONDICION

Maylín está estable, pero sufrió golpes en una de sus piernas, cabeza y en la cara.