En esta gruta estaba ubicada la imagen de San Vicente de Paul, pero fue hurtada. (Foto: ANAYANSI GAMEZ /EPASA)
Yanelis Domínguez
| DIAaDIA
Rodeados de cochinadas. Excrementos de personas esparcidas por las veredas, puertas forzadas, lámparas robadas y malos olores es el panorama que rodea a la Iglesia San Vicente de Paúl, cerca de la Asamblea Nacional.
Pero no solo presenta este problema, sino que en horas de la noche es frecuentada por travestis y fumadores de drogas que al amanecer dejan pruebas desagradables de sus fechorías.
UN MAL QUE SE INCREMENTA
El padre Justino Carrasquilla, párroco de esta iglesia, explicó que este problema se viene presentando desde hace dos años cuando reabrieron la estructura y que lo que más le duele es el irrespeto hacia la santidad, pues se han robado hasta la imagen de piedra del santo.
Él ha pedido en reiteradas ocasiones que se le asigne un policía municipal para que vigile los predios de este templo, especialmente porque al frente funciona el Parvulario de Santa Ana y el Centro Educativo Santa Isabel, que albergan niños pequeños.
VANDALISMO A CADA RATO
Este medio pudo conocer que el año pasado hubo más de 30 hurtos y en lo que va del año se han efectuado nueve más.
En una inspección realizada se encontró hasta condones usados frente a la puerta principal de la iglesia.
Los domingos, desde la madruga, hay un personal que se encarga de realizar la limpieza para poder tener un ambiente ameno para la celebración de la eucaristía.
IRRESPETO
Muchos orates se han quitado la ropa frente al lugar durante la hora de clases de los niños.