Ante tal situación, el gobernador de la provincia, José Brown, dio a conocer que a primeras horas de la mañana se reunió con el subcomisionado Wellington Zambrano, jefe de la zona policial, y le dio instrucciones precisas de no atacar a los manifestantes.
El funcionario, quien también es de la etnia ngäbe-buglé se ofreció como mediador en caso de ser necesario, pues incluso habla perfectamente el dialecto, lo que facilitaría la comprensión entre ambas partes.
En Bocas del Toro, los cierres se iniciaron desde el lunes pasado; sin embargo, el cierre indefinido se declaró a las 6:00 p.m. del jueves en el puente sobre el río Changuinola.