
Luego que en la tarde de ayer el Gobierno Nacional y líderes indígenas Ngäbe Buglé firmaran un acuerdo que le pondrá fin a los conflictos entre unidades de la policía a aborígenes, hoy las calles que eran cerradas fueron reabiertas pero las vigilias y las expectativas siguen.
Con el acuerdo, que está compuesto por 10 puntos como liberación de los detenidos, investigación de las muertes de los dos indígenas caídos en los conflictos y apoyo a los familiares de los fallecidos.
La vigilia se da en las afueras de la Asamblea Nacional y en varios puntos del interior del país en las aceras de las calles. Los indígenas aseguran estar vigilantes ante cualquiera situación.
La cacique general, Silvia Carrera dijo que ahora queda luchar por que no se construya hidroeléctricas en áreas comarcales y que no se efectué proyectos mineros.