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Sudan la gota gorda, pero con mucho gusto. Y es que ellos se sacrifican para dar de comer a miles de jóvenes durante cuatro dí­as, pero no es durante el Carnaval.

Se trata de la comunidad de jóvenes Santa Teresa de Jesús en Chitré, además de jóvenes voluntarios y adultos mayores que se identifican con la evangelización multitudinaria que se ofrece anualmente a través del Encuentro de Renovación Juvenil, en Herrera. Este año es su versión número 27 y cada año conlleva una responsabilidad mayor a pesar del cansancio que deja.

Nelva González de De Gracia, quien tiene 15 años de pertenecer a dicha comunidad, es la que está a cargo de la comisión de cocina e informó que ayer al mediodí­a ya se tení­an diez reses picadas y congeladas, listas para llevar a la paila.

Habí­a corredera como en cualquier cocina, sólo que esta es gigante, al aire libre. Cerca del área de cocina otros jóvenes se las ingeniaban para rajar la leña.

MENOS

Cada año se cocinan unos 35 quintales de arroz, sin embargo, sólo habí­a unos 30 sacos.