¿Mi cara? ¡La amo! Pero si la piel pudiera elegir su mejor momento diario, éste sería sin duda la noche por su poder regenerador, reparador y calmante. Las cremas de noche aportan ese suplemento que la piel necesita, a partir de cierta edad. Y lo mejor es que puede dormir tranquila, mientras las cremas cuidan su piel.

La regeneración de la dermis (capa de la piel), alcanza su punto álgido entre la 1 y las 3 horas de la madrugada y, preparar la piel para sacar el máximo provecho, es el principal objetivo de las cremas de noche. Los últimos estudios dermatológicos realizados señalan que, a partir de los 25 años, es imprescindible iniciar un tratamiento para impedir la destrucción de las células, favorecer la microcirculación y la eliminación de toxinas y mantener la máxima hidratación. ¡Hágalo!