El romero, además de embellecer el jardín con sus flores, tiene usos medicinales.

Uno de ellos es que funciona como purificador del agua, para lo que se hierve el agua con una ramita seca con el fin de eliminar las bacterias.

También es popular el té de romero y se prepara de la siguiente forma: Se añade una cucharadita llena de hojas de romero en 1/4 de litro de agua fría. Esta se calienta lentamente hasta que hierva, se retira inmediatamente del fuego y se cuela. Funciona como reconstituyente y se puede tomar una taza por la mañana o al mediodía, especialmente, para después de enfermedades infecciosas y gripe.

El cultivo de la planta es variado, tanto en potes como al aire libre, y no requiere de cuidados especiales.