Su cuerpo quedó cubierto de perdigones


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Félix pide justicia por lo ocurrido en la provincia.

Fotos: MAYRA MADRID

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Félix pide justicia por lo ocurrido en la provincia.

    Fotos: MAYRA MADRID

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Aún siente mucho dolor.

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Félix pide justicia por lo ocurrido en la provincia.

    Fotos: MAYRA MADRID

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Aún siente mucho dolor.

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Félix pide justicia por lo ocurrido en la provincia.

    Fotos: MAYRA MADRID

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Aún siente mucho dolor.

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Félix pide justicia por lo ocurrido en la provincia.

    Fotos: MAYRA MADRID

  • Su cuerpo quedó cubierto de perdigones

    Aún siente mucho dolor.

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    Félix pide justicia por lo ocurrido en la provincia.

    Fotos: MAYRA MADRID

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    Aún siente mucho dolor.

Mayra Madrid/ Chiriquí - DIAaDIA

En busca de defender sus derechos y unirse a sus hermanos de la comarca Ngäbe Buglé en el distrito de San Félix, provincia de Chiriquí, el señor Félix Villandeo Bejerano, de 49 años, se convirtió en uno de los heridos cuando se trasladó desde Alto Quiel, en el distrito de Boquete, a unirse a la lucha.

“Recuerdo ese día con un gran dolor, solo sentí cómo algo golpeaba mi cuerpo, eran una especie de canicas pequeñas, así como algunos balines”, explicó Villandeo, que cuando se vio tenía puntitos con golpes en el pecho, hombros, piernas, brazos, todos cubiertos de sangre.

Según el indígena, una vez fue detenido lo llevaron al Hospital Regional Rafael Hernández en David y allí lo mantuvieron por casi dos días, donde le limpiaron las heridas. “Solo me sacaron tres balines y me dijeron que los demás que mantengo en el cuerpo están muy profundos, por lo que no se podían sacar, ahora uno de los perdigones mantiene mi mano con poca movilidad, lo que me preocupa muchísimo”, aseguró.

 
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