Un viejo automóvil de los años ´50, propiedad de Karol Wojtyla cuando todaví­a viví­a en Polonia y mucho antes de convertirse en el Papa Juan Pablo II, no consiguió ser vendido al precio deseado por el propietario, por lo que fue retirado de una subasta en Parí­s. El auto FSO Warszawa, de color verde, Wojtyla lo empleaba en sus desplazamientos por Cracovia.